Tovat
Parte 2:
El final
Tovat. El dulce y tierno Tovat. Tras la pérdida de Petri, Tovat no jugaba con nadie. Solitario, dormilón... Tovat había perdido sus cualidades de hámster "activo". Lo sorprendente era que el comedero duraba semanas, con lo comilón que era Tovat! Y lo que realmente sorprendío... Era que los preciados kikos de Tovat seguían en el comedero. Con lo que le gustaban.... Tovat se pasaba todo el día en la cama. Bueno, su cama, por alguna razón, siempre estaba como se la poníamos, no se hacía la cama. Y dormir en unos cachos de algodón sin deshilachar un poco es incomodo... ¿No creéis? Todo eran preguntas y nada respuestas. No sabíamos que le pasaba a Tovat. Hasta que un día, decidí cogerlo para darle un poco de cariño. ¡Y que sorpresa me lleve! Un bulto rosa se situaba en el labio de Tovat. No me extrañaba que no pudiera ni hacer la cama ni comer, porque querer hacerlo, ¡claro que quiere! Pero con ese bulto no podía beber tampoco. Veterinario, metodos caseros... Nada funcionaba. Hasta que, un día, Tovat decidió marchar. El veterinario lo sacrificó. Pero, a pesar de nuestro gran aprecio hacia Tovat, el nos tenía mas aprecio a nosotros.
